Impuesto a la pensión
No hay dudas de que en cualquier país del mundo un impuesto a los intereses que le pagan los bancos a los ahorrantes estaría justificado. Aquí no.
En esos países, con mayor nivel de desarrollo o diferente estructura social a la nuestra, el impuesto tiene su justificación en que los intereses son una "ganancia", y como tal, debe pagar.
En este país de nuestros amores, sin embargo, la inmensa mayoría de las personas que tienen ahorros en forma de certificados en los bancos usan estos ahorros para suplir las deficiencias del Estado en proveerles suficiente protección social.
¿Cómo se protege una pareja que ha ahorrado toda su vida y se encuentra con una pensión miserable o simplemente sin pensión, ante una enfermedad o el creciente costo de la vida? Sencillamente apelando a esa "ganancia" que es el resultado de su virtud de ahorrar durante toda la vida, que ahora se pretende penalizar.
¿Quién acude en auxilio de la viuda que tiene que operarse y a la cual su marido le dejó un par de casas que tiene en alquiler para poder vivir?
Lo que quiero decir es que el Estado, que les ha fallado a esas personas, lo menos que puede hacer es permitirles que continúen con su vida sin imponerles mayores sacrificios.
Se dirá que esas personas pueden invertir en algún negocio o empresa. En realidad, no todo el mundo tiene vocación de empresario y en algunos casos ni siquiera la formación para ello.
Dejemos a los viejos tranquilos.
atejada@diariolibre.com
En esos países, con mayor nivel de desarrollo o diferente estructura social a la nuestra, el impuesto tiene su justificación en que los intereses son una "ganancia", y como tal, debe pagar.
En este país de nuestros amores, sin embargo, la inmensa mayoría de las personas que tienen ahorros en forma de certificados en los bancos usan estos ahorros para suplir las deficiencias del Estado en proveerles suficiente protección social.
¿Cómo se protege una pareja que ha ahorrado toda su vida y se encuentra con una pensión miserable o simplemente sin pensión, ante una enfermedad o el creciente costo de la vida? Sencillamente apelando a esa "ganancia" que es el resultado de su virtud de ahorrar durante toda la vida, que ahora se pretende penalizar.
¿Quién acude en auxilio de la viuda que tiene que operarse y a la cual su marido le dejó un par de casas que tiene en alquiler para poder vivir?
Lo que quiero decir es que el Estado, que les ha fallado a esas personas, lo menos que puede hacer es permitirles que continúen con su vida sin imponerles mayores sacrificios.
Se dirá que esas personas pueden invertir en algún negocio o empresa. En realidad, no todo el mundo tiene vocación de empresario y en algunos casos ni siquiera la formación para ello.
Dejemos a los viejos tranquilos.
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