Isabel II no planea ceder su lugar a su hijo Carlos, según el Sunday Times
Se desechan así los recientes rumores acerca de que la monarca británica planea invocar la llamada Ley de Regencia en un futuro cercano
LONDRES. La reina Isabel II no tiene ninguna intención de cederle su lugar a su primogénito, Carlos de Inglaterra, el heredero al trono, según divulga hoy el dominical “The Sunday Times”, citando fuentes del entorno de la monarca.
Esas fuentes, cuya identidad no revele el periódico, muy cercanas a la soberana, sostienen que la Reina defiende el principio de que “lo primero es la obligación, lo primero es el país” y que ella “va a estar ahí”, además de asegurar que Isabel II “está más comprometida que nunca” con su cargo.
Se desechan así los recientes rumores acerca de que la monarca británica planea invocar la llamada Ley de Regencia en un futuro cercano, algo que ni entra dentro de los planes del palacio de Buckingham -su residencia oficial en Londres- ni en los de Clarence House -donde vive el príncipe de Gales-, según tres fuentes diferentes.
Esa Ley estipula que la monarca podría ceder sus poderes al heredero a la corona en el caso de sufrir una incapacidad o enfermedad.
Desde palacio se recuerda el compromiso hecho por la Reina en su 21 cumpleaños, cuando dijo: “Declaro que toda mi vida, sea ésta larga o corta, estaré dedicada a vuestro servicio”.
El Sunday Times indica que la pasada semana se rumoreó que la Reina habría comentado a su círculo más íntimo que podría abandonar el trono si continuase reinando en un plazo de cuatro años, cuando tenga 95.
“La Reina siempre ha sido muy vehemente en que nunca habrá una regencia a menos que esté enferma hasta el punto de que se vea incapaz de realizar sus tareas”, apuntó una de esas fuentes.
“Mientras esté sana, sin tener en cuenta su edad, no veo una regencia”, agregó.
No obstante, Isabel II ya no realiza viajes oficiales al extranjero de larga distancia, algo que hacen en su nombre el príncipe Carlos y su esposa, la duquesa de Cornualles.
La monarca también comparte otras tareas reales, como asistir a actos de investidura, con su primogénito, la princesa Ana y el duque de Cambridge, quien precisamente abandonó su trabajo como piloto de ambulancias aéreas el pasado mes a fin de asumir más compromisos reales.
Por su parte, el pasado día 2, el esposo de Isabel II, el príncipe Felipe, se retiró oficialmente a los 96 años de la vida pública, al participar en su último compromiso oficial como miembro de la familia real, pasando revista a tropas de la Real Marina británica.
Con motivo del vigésimo aniversario del fallecimiento de la princesa Diana en París, un reciente sondeo elaborado por la firma ICM reveló que un 51 % de británicos quiere que el próximo rey sea el príncipe Guillermo.
Esa encuesta indicó además que un 36 % consideró que, en el caso de que Carlos releve a su madre al frente de la Corona, Camilla, su esposa, debería ser princesa consorte, en lugar de reina.