Secretos de los negocios exitosos

HE VISTO NEGOCIOS que eran exitosos y terminan perdiendo su encanto después de décadas. Quizá sus dueños dejaron de innovar o perdieron la iniciativa que los hizo ser emprendedores. Pensar en un buen negocio no es realizarlo. Del dicho al hecho hay mucho trecho. Tampoco un negocio que no esté teniendo éxito no es descartable. He visto negocios resurgir de las cenizas como el ave Fénix. En ocasiones un cambio de dueño, en otras un cambio en el dueño.

Podemos decir que el principio HES (Hazlo Estúpidamente Simple) puede ser uno de los criterios para lograr el éxito. Mientras las personas buscan simplificarse la vida, las empresas exitosas buscan lo mismo, simplificarles la vida a sus clientes.

Recordemos que compramos soluciones; el objetivo del que nos vende debe ser que su producto o servicio sea una solución para alguna necesidad existente que tengamos, aunque no siempre sabemos qué nos falta o para qué necesitamos una solución. Uno de los trucos imprescindibles para hacer que nuestro producto o servicio sea un éxito es tener personas que sepan llevarlos al consumidor final.

En mi seminario “CardioVentas” enseño a los vendedores que a los clientes no se les crean las necesidades, sino que el gran vendedor encuentra las existentes, y luego se las hace entender. En muchos casos el cliente sabe lo que quiere, pero no lo que necesita. Este método lo muestro por completo en mi libro Ventas, Retórica y Lenguaje del Cuerpo de manera que la buena idea se convierta en un buen negocio.

Otro punto a tomar en cuenta para lograr poner en ejecución una idea como negocio es el relacionamiento con las personas; los colaboradores y los clientes. Un proverbio chino dice: “El hombre que su cara no ríe no debe tener un comercio”. Yo no sería tan drástico, pero sí pienso que es imprescindible que las personas que están de cara al cliente sean entes que les guste trabajar con personas... si no saben deben aprender.

Si quiere herramientas que sirvan debe estudiar y aplicar la inteligencia emocional, principalmente la parte que se dedica al relacionamiento con los demás; la inteligencia interpersonal. La trato por extenso en mi libro Migomismo II. Empatía, interés por los demás, interés por los cambios, comunicación asertiva, manejo de conflictos y muchas más son las habilidades emocionales que dominan los dueños de ideas que han sido exitosas.

Otra herramienta importante es la administración de la empresa. Cuando su negocio crezca un poco tendrá que tomar decisiones que no se aprenden en cualquier lugar. Además, para crear la experiencia puede ser que tenga que invertir mucho dinero, cometiendo errores. Le recomendaría que aprenda al respecto, se busque un administrador o contrate un consultor que le ayude a tomar decisiones importantes en tal sentido.

Las ideas pasan por varias fases antes de ser un éxito, no deje para mañana lo que pueda aprender hoy.

Diego Sosa