Microsoft (y Google) jubilan al Internet Explorer
Alguna vez fue utilizado por casi mil millones de personas, por lo que es una de las marcas tecnológicas más conocidas del mundo. Pero incluso Microsoft, su fabricante, se ha visto obligado a admitir que es profundamente detestado.
Internet Explorer - el software que inició la guerra de navegadores de la década de 1990 y se convirtió en un símbolo del antiguo dominio que ejercía la compañía de Seattle sobre el mundo de la tecnología - está a punto de ser jubilado.
El grupo confirmó esta semana que no iba a utilizar el nombre de IE para el nuevo navegador que planea integrar con la próxima versión de su sistema operativo Windows, programado para finales de este año. El software revisado, llamado en código Project Spartan, tiene la intención de catapultar a Microsoft más allá del mundo de la Web 1.0 para el que Internet Explorer fue diseñado.
Hace casi una década, Dean Hachamovitch, el entonces jefe de la división de IE, confesó en una conferencia del sector: "Lo echamos a perder".
Con Spartan, Microsoft espera dejar atrás las debilidades de IE para producir un navegador que sea más adecuado para la vida digital que se desarrolla en varios dispositivos - parte de la estrategia del nuevo presidente ejecutivo Satya Nadella para romper la dependencia que tiene la compañía de su antiguo monopolio de las computadoras personales.
Tom Bedecarre, presidente de Akqa, una agencia de publicidad digital propiedad de WPP, dijo que ya hace mucho había vencido la fecha de caducidad de la marca de 20 años de edad. "En la guerra del futuro, que es en los dispositivos móviles, están perdiendo", dijo. "Nadie va a descargar Internet Explorer como su navegador móvil".
Microsoft ha admitido que no pudo hacer de Internet Explorer parte más querida de la vida cotidiana a través de los años. Incluso recurrió a burlarse de sí misma en algunos de sus anuncios, refiriéndose al navegador como "El Navegador Que Te Encantaba Odiar".
"Ha sido un problema del producto durante mucho tiempo", dijo Dan Brewster, diseñador interactivo principal con Wolff Olins, la agencia de mercadotecnia. "A las personas no les gusta", añadió, pero lo utilizaban sólo porque venía preinstalado en sus equipos o porque sus empleadores lo exigían.
La importancia histórica de IE quedó sellada a finales de la década de 1990. Diseñado para contrarrestar el surgimiento del pionero de los navegadores, Netscape, en los albores del Internet, se enviaba gratuitamente con el omnipresente sistema operativo Windows - una táctica que más tarde hizo de Microsoft el blanco de una investigación antimonopolio.
Superó a Netscape en tres años y pasó a dominar el acceso al mundo en línea, lo que representaba aproximadamente el 95 por ciento del uso de los navegadores poco después del fin del milenio. Pero una mezcla de complacencia y fracaso de no haber anticipado el cambio a los dispositivos móviles sellaron el destino de IE.
Primero el navegador de código abierto Firefox y, más recientemente el Chrome de Google, se adueñaron de la cuota de mercado de IE, utilizando tecnología más rápida y un diseño más pulido para ganar usuarios. La cuota de uso de navegadores que le corresponde a Microsoft ha caído a alrededor del 20 por ciento, similar a la de Firefox, mientras que Chrome ha aumentado a casi el 50 por ciento, según la actividad en línea.
Aunque se le está obligando a jubilarse, el nombre IE continuará vivo, aunque sólo sea por un corto tiempo. Se incluirá una nueva versión de IE en el próximo lanzamiento de Windows, junto con el navegador Spartan, para hacerles la vida más fácil a las compañías que han desarrollado software para trabajar con el navegador.
(c) 2015 The Financial Times Ltd. All rights reserved
Internet Explorer - el software que inició la guerra de navegadores de la década de 1990 y se convirtió en un símbolo del antiguo dominio que ejercía la compañía de Seattle sobre el mundo de la tecnología - está a punto de ser jubilado.
El grupo confirmó esta semana que no iba a utilizar el nombre de IE para el nuevo navegador que planea integrar con la próxima versión de su sistema operativo Windows, programado para finales de este año. El software revisado, llamado en código Project Spartan, tiene la intención de catapultar a Microsoft más allá del mundo de la Web 1.0 para el que Internet Explorer fue diseñado.
Hace casi una década, Dean Hachamovitch, el entonces jefe de la división de IE, confesó en una conferencia del sector: "Lo echamos a perder".
Con Spartan, Microsoft espera dejar atrás las debilidades de IE para producir un navegador que sea más adecuado para la vida digital que se desarrolla en varios dispositivos - parte de la estrategia del nuevo presidente ejecutivo Satya Nadella para romper la dependencia que tiene la compañía de su antiguo monopolio de las computadoras personales.
Tom Bedecarre, presidente de Akqa, una agencia de publicidad digital propiedad de WPP, dijo que ya hace mucho había vencido la fecha de caducidad de la marca de 20 años de edad. "En la guerra del futuro, que es en los dispositivos móviles, están perdiendo", dijo. "Nadie va a descargar Internet Explorer como su navegador móvil".
Microsoft ha admitido que no pudo hacer de Internet Explorer parte más querida de la vida cotidiana a través de los años. Incluso recurrió a burlarse de sí misma en algunos de sus anuncios, refiriéndose al navegador como "El Navegador Que Te Encantaba Odiar".
"Ha sido un problema del producto durante mucho tiempo", dijo Dan Brewster, diseñador interactivo principal con Wolff Olins, la agencia de mercadotecnia. "A las personas no les gusta", añadió, pero lo utilizaban sólo porque venía preinstalado en sus equipos o porque sus empleadores lo exigían.
La importancia histórica de IE quedó sellada a finales de la década de 1990. Diseñado para contrarrestar el surgimiento del pionero de los navegadores, Netscape, en los albores del Internet, se enviaba gratuitamente con el omnipresente sistema operativo Windows - una táctica que más tarde hizo de Microsoft el blanco de una investigación antimonopolio.
Superó a Netscape en tres años y pasó a dominar el acceso al mundo en línea, lo que representaba aproximadamente el 95 por ciento del uso de los navegadores poco después del fin del milenio. Pero una mezcla de complacencia y fracaso de no haber anticipado el cambio a los dispositivos móviles sellaron el destino de IE.
Primero el navegador de código abierto Firefox y, más recientemente el Chrome de Google, se adueñaron de la cuota de mercado de IE, utilizando tecnología más rápida y un diseño más pulido para ganar usuarios. La cuota de uso de navegadores que le corresponde a Microsoft ha caído a alrededor del 20 por ciento, similar a la de Firefox, mientras que Chrome ha aumentado a casi el 50 por ciento, según la actividad en línea.
Aunque se le está obligando a jubilarse, el nombre IE continuará vivo, aunque sólo sea por un corto tiempo. Se incluirá una nueva versión de IE en el próximo lanzamiento de Windows, junto con el navegador Spartan, para hacerles la vida más fácil a las compañías que han desarrollado software para trabajar con el navegador.
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