Policías matan dos que supuestamente enfrentaron a patrullas
SANTO DOMINGO. Dos hombres cayeron abatidos ayer por sendas patrullas de la Policía en hechos ocurridos por separado en los municipios Santo Domingo Este, y Verón, cuando atacaron a tiros y a machetazos a los agentes del orden.
El parte policial indica que los occisos son un joven no identificado que supuestamente enfrentó a tiros la Policía en la avenida Charles de Gaulle con la esquina carretera de Mendoza. En tanto que Juan José Jiménez Encarnación, de 38 años, habría tratado de agredir a machetazos a una patrulla en Verón, provincia de La Altagracia.
El hombre abatido en Mendoza, que aún no ha sido identificado, era de tez oscura, de unos 25 a 30 años, pelo crespo, y 170 libras de peso, que llevaba puesto un jean azul y dos abrigos negros.
El informe preliminar del caso explica que una patrulla le daba seguimiento a dos hombres que momentos antes habían asaltado a Marcos Terrero Marte (a) Maicol, de 18 años, a quien despojaron de una motocicleta Suzuki AX-100, negra, placa K02551595.
Cuando la patrulla avistó a los asaltantes les ordenó detenerse, estos respondieron disparando con armas de fuego ante lo cual los agentes ripostaron hiriendo al desconocido en la cabeza, mientras su compañero escapaba en una de las motocicletas, según el reporte.
Los agentes recuperaron un arma de fuego de fabricación artesanal (chilena) y la motocicleta robada a Terrero Marte.
Mientras que Jiménez Encarnación fue abatido por una patrulla en lotificación Verón, en el distrito municipal del mismo nombre, cuando intentaba agredir con un machete a su concubina Lidia Paniagua Veras, de 37 años, añade el reporte.
Los agentes llegaron al lugar atendiendo una llamada telefónica, ordenándole a Jiménez Encarnación que soltara el machete, pero éste le fue encima a los agentes que repelieron la agresión hiriéndolo de bala en ambas piernas y falleció poco después en la clínica rural de ese distrito municipal.
Los cadáveres fueron enviados hacia el Instituto Nacional de Patología Forense y la oficina regional del INACIF en San Pedro de Macorís, respectivamente, para fines de necropsia mandatorios.