Oposición percibe una rendición de cuentas de un año “de caos institucional” y retrocesos en la salud

SANTO DOMINGO. En la víspera del discurso de rendición de cuentas del Presidente Danilo Medina crecen las expectativas por parte de la población sobre la alocución del mandatario mientras opositores creen que áreas importantes como el empleo y la salud no han mejorado.

Ciudadanos de a pie, estudiantes y empleados, consultados en las calles de forma aleatoria expusieron que temas como el desempleo, la seguridad ciudadana y los salarios no deben quedar fuera de las palabras del mandatario.

“Tratar los asuntos de corrupción y corregirlos para ver si el dinero llega a las masas pobres”, pidió al mandatario Joan Montero, quien es predicador de la religión evangélica.

Para la estudiante Lía Polanco, la agenda del presidente Medina el día 27 de febrero debería comenzar por los cambios en su Gobierno y las acciones que tomará para garantizar la seguridad ciudadana, afectada por la ola de robos y atracos y la delincuencia que ha cobrado con la vida de 1,198 personas en 2017, conforme a las estadísticas del Observatorio de Seguridad Ciudadana del Ministerio de Interior y Policía.

Mientras que el estudiante de psicología Cristofer Galán entendió que el mandatario debe referirse al tema de la migración ilegal de personas a través de la frontera con Haití.

Economía y Salud

En tanto que para el economista Miguel Ceara Hatton el año 2017 “muestra un caos institucional” por el tema de la corrupción y la impunidad, que se vio evidenciado en el informe de Transparencia Internacional que calificó al país como uno de los más corruptos del hemisferio.

A juicio de Ceara Hatton, miembro del equipo económico del opositor Partido Revolucionario Moderno (PRM), es preocupante el tema del endeudamiento público que aumentó entre 1,300 millones de dólares y sobrepasó el 51% del Producto Interno Bruto de acuerdo con el Fondo Monetario Internacional.

“La tendencia es que no sólo aumenta la deuda sino que aumenta los intereses”, analiza el economista, quien considera que la economía dominicana necesita de un gran reajuste estructural.

Según explica se sostiene en que industrias como el turismo que genera gran parte de las divisas “no genera empleos”.

Agrega que este sector a penas aportó un 13% de los empleos en 2017.

El economista reconoce como un punto de luz de la actual administración pública el incremento de los salarios que se registró el pasado año.

Sin embargo, Ceara Hatton advirtió que en el 2017 hubo “un deterioro” en los servicios públicos como la salud y en sectores como las exportaciones no mineras que se han mantenido “paralizadas y no reaccionan”.

También el jefe de Cardiología del Hospital Salvador B. Gautier, Fulgencio Severino, señaló que los indicadores de salud del año 2017 “se fueron a pique” debido a que indicadores como la mortalidad materna e infantil están “sumamente elevados”.

“Las acciones de salud del Gobierno tienen muy poco impacto en lo que son los objetivos de esta política de reducir la mortalidad”, asegura Severino, quien es además presidente del Movimiento Patria Para Todos (MPT).

Llamó a diseñar una política pública para reducir este flagelo, que según el último cálculo de la Organización Mundial de la Salud es de 141 fallecimientos por cada 100,000 niños que nacen.

Severino consideró que el bajo presupuesto en salud es causante de muertes por afectaciones al corazón como el infarto y los accidentes cardiovasculares que necesitan de tratamiento oportuno para evitar la muerte.

“El PLD como partido no entiende que este es un país muy pobre y que la privatización de los servicios de salud entraña muchos recursos que hay que tener para mantener nuestros servicios”, alerta el cardiólogo.

Para Severino uno de los mayores retos del Gobierno del presidente Medina es concluir con la remodelación de los 57 hospitales que anunció a principios de su primer mandato y que han provocado un “caos” en las atenciones médicas de las emergencias debido a que esto ha generado en una “negación del servicio” a los pacientes que deben ser atendidos en medio del polvo y los reductos que expiden los materiales de construcción.

Estimó necesario invertir al menos el 7 por ciento del Producto Interno Bruto al sistema de salud pública para extender la atención médica a la mayoría de la población pobre que depende en un 50 por ciento de los servicios hospitalarios privados.

Carlos Reyes