Azul y Tuningo, dos cavernas atractivas con interés histórico en Hato Mayor

EL VALLE, HATO MAYOR. La naturaleza sorprende a cada paso que se da en los bosques y potreros de la comunidad de Tuningo, un paraje ubicado al sur de este municipio y cercano al Parque Nacional Los Haitises, que posee hermosos atractivos, de interés histórico y cultural.

Aquí, frente a la comunidad, integrada por unas 55 familias, existen dos cavernas con estalactitas y estalagmitas, así como semis y petroglifos de la cultura indígena.

La Tuningo, es una caverna con cuatro entradas de 1, 2, 3 y 6 metros de ancho, respectivamente.

Posee dos galerías o salones. La sala mayor alcanza los 40 metros cuadrados y la otra seis metros. La altura de los salones superan los 15 pies.

Es rica en estalactitas y estalagmitas y su interior recibe rayos del sol por las cuatro entradas, permitiendo que se observen algunas matitas de helecho silvestre.

En tiempo de huracanes y tormentas es el refugio de la generalidad de los habitantes de Tuningo.

En sus paredes se pueden observar panales de avispa negra, un insecto autóctono, que según la tradición histórica, eran usados por los indígenas taínos, para poner a pruebas la valentía y firmeza de los guerreros de la zona. Son avispa que pican como las abejas de piedra.

Desde el interior de la gruta, se puede observar el pequeño poblado de Tuningo, cuyos habitantes utilizan las aberturas de rocas, para protegerse de las inclemencias de los fenómenos atmosféricos Cueva Azul, posee cuatro salas y cruza la montaña de un extremo a otro y en su interior hay petroglifo y estatuilla indígenas talladas en piedra. Es más espaciosa que La Tuningo.

Aquí también está el nacimiento del río Yanigua con un impresión antesalto de agua, así como ojos de aguas y ríos subterráneos que zumban debajo de los pies del caminante.

Los pisos de ambas grutas son resbaladizos, debido a que están compuestos de excrementos de murciélagos, que abundan por millares en la zona.

Las cavernas, que forman parte de los atractivos del turismo montaña de Hato Mayor, son poco frecuentadas, debido a las malas condiciones de los caminos vecinales, que te llevan por la extensa llanura al lugar.

Otros atractivos

Las masas de agua, localizadas en los potreros 1, 12, 16 y la 17 del Consejo Estatal del Azúcar, son pequeñas, pero existen unas 12 lagunas que se alimentan de manantiales y de escorrentías subterráneas que se deslizan de las montañas del parque nacional Los Haitises, que le quedan al oeste.

Las lagunas dulces son aquellas alejadas de la costa y las que están próximas a montañas y valles, alimentadas por chorros de agua sabanera, escorrentías, norias, riachuelos y manantiales.

Entre las más importantes de esas reservas acuáticas se encuentran las de Palilo, Prieta, Los Hicacos, Clara y Oleans.

Cómo llegar

Las rutas a pie permiten un contacto muy directo con la naturaleza.

Pueden realizarse acompañados por un guía-intérprete. Se aconseja que antes de realizar cualquier itinerario, libre o guiado, se haga acompañar de agua de beber, gorra de sol, porque la temperatura te ponen a sudar aun vaya montado.

Cuando se va desde Hato Mayor, hay que entrar por el kilómetro 23 hasta subir al poblado de Mango Limpio y doblar hacia el norte. La primera en ser localizada es Laguna Prieta, luego Hicaco, seguida de La Clara y finalmente La Palilo, todas a bordo de un empedrado camino que sirve de carretera.

Manuel Antonio Vega