Presentan aplicación en Argentina para “conectarse” con el papa Francisco
BUENOS AIRES. La Fundación Papa Francisco presentó este martes en Buenos Aires el lanzamiento de una aplicación que reproduce frases y proporciona información actualizada sobre la agenda y la trayectoria del pontífice, de manera que cualquier persona pueda estar “conectada” con él e incluso recibir “bendiciones diarias”.
“A todo el mundo le gusta el teléfono, todo el mundo está conectado a uno. En medio de esa conexión que tanto le agrada al ser humano, la idea es estar en contacto con el papa Francisco y todos los caminos para ello son buenos”, afirmó en diálogo con Efe la presidenta de la Fundación, Liliana Sanucci.
Se trata de un sistema automatizado -una especie de robot- que contiene en su matriz una colección de datos e información relacionada con los últimos viajes del papa, sus discursos, sus apariciones públicas más recientes y su peregrinaje, entre otros y que responde al usuario de forma instantánea.
El proyecto fue elaborado utilizando el software tecnológico Wabot para la creación y desarrollo informático de la aplicación, que funciona a través del servicio de mensajería WhatsApp.
De esta manera, los fieles pueden entablar una conversación simulada con el pontífice donde quiera que se encuentren, recibir sus “bendiciones” y contenido multimedia en cualquier momento tan solo descargando la aplicación y agregando el número de teléfono establecido a su agenda de contactos.
“Vamos a atraer a un montón de jóvenes, y no tan jóvenes, a estar más en contacto de lo que ya están con el papa Francisco, porque, ¿quién no ama al papa? Todos lo hacemos”, aseguró Sanucci.
Esta idea surgió, en palabras de uno de los fundadores de Wabot desarrollador de la tecnología Kevin Yang, de su deseo de “viralizar la palabra del papa” en un mundo “donde todo lo viral es violencia”.
“Nuestra idea es solidaria con la sociedad, para que pueda llegar a toda la gente que quiera utilizarla porque es fácil hacerlo desde cualquier tipo de celular”, añadió la directora del proyecto, Adriana Villagrán, durante su intervención.