Pese a esfuerzos, cúmulo basura sigue en Malecón

SANTO DOMINGO. El Ministerio de Obras Públicas continúa sacando de manera manual residuos sólidos del mar Caribe, en la playita cercana al Fuerte San Gil, en el Distrito Nacional, y hasta ayer unas 300 toneladas habían sido retiradas.

Miembros de la Comisión Militar y Policial y de la Dirección de Mantenimiento de Carreteras del Ministerio de Obras Públicas sacan un promedio de 60 toneladas de residuos por día de acuerdo con el general Estanislao Gonell.

Aunque en ese lugar es que hay la mayor concentración de hombres con picos, palas y rastrillos amontonando la basura, también en otros como Güibia y cerca de la Plaza Fray Antón de Montesinos hay personal retirando los escombros.

Para sacar los residuos en funda y cubetas hasta la avenida George Washington, debido a que no es posible bajar retroexcavadoras al lugar, se forman cadenas humanas, mientras otros esparcen la basura que las olas lanzan a las orillas.

Ayer en la tarde, el general Gonell ofreció una rueda de prensa en la que explicó que hasta ese momento habían retirado alrededor de 300 toneladas de pedazos de madera, botellas, vasos, platos y otros utensilios plásticos. "La ciudadanía debe hacer conciencia y no arrojar desechos al mar ni a las calles porque contamina al medio ambiente y debe contribuir con la limpieza de playas y ríos", dijo.

En la playita de San Gil se ha formado una muralla de lila y otros desperdicios de más de cinco pie, que el mar va lanzando y los militares arrastran. De igual manera, una cantidad de palos son sacados y llevados hasta la acera de la avenida.

Desde hace siete días, los residuos son retirados en fundas con capacidad para 55 galones que son llenadas en la zona y transportadas al vertedero de Duquesa. Unos 800 hombres trabajan en la jornada de limpieza del litoral del Malecón.

Gran parte de la basura fue arrastrada por lluvias de la tormenta Beryl hasta los ríos Ozama e Isabela, y liberadas al mar, tras la apertura del puente flotante. Gonell aseguró que las brigadas se mantendrán en el lugar el tiempo que sea necesario.

Adalberto de la Rosa