Resuelven el asesinato de una joven con pruebas de ADN tras casi 40 años del suceso en EE.UU.

Evidencia de ADN demostró que un hombre que murió en prisión hace varios años fue responsable del asesinato en 1984 de una joven cuyo cadáver se halló más de una década después de su desaparición, dijeron las autoridades en Nueva Jersey.

Funcionarios de las fiscalías estatal y del condado Mercer anunciaron la semana pasada “la identificación concluyente” de Nathaniel Harvey como la persona responsable de la agresión sexual y el asesinato de Donna Macho.

Macho, de 19 años, desapareció de la casa de East Windsor donde residía con sus padres y hermanas alrededor del 26 de febrero de 1984. Un líder Boy Scout encontró sus restos óseos en un área boscosa en Cranbury el 2 de abril de 1995, y su identidad fue confirmada por registros dentales.

Alrededor de la época en que desapareció, Harvey fue arrestado por varias agresiones sexuales, así como por un asesinato no relacionado. Las autoridades dijeron que fue identificado desde el principio como un posible sospechoso en el asesinato de Macho “pero las pistas de investigación se disiparon y el caso se enfrió”.

“Al cometer sus crímenes, los fiscales dicen que Harvey generalmente ingresaba a casas abiertas, donde mantenía cautivas y violaba a mujeres jóvenes”, alegaron las autoridades.

Las pruebas genéticas hechas a las evidencias de la habitación de la víctima no coincidían con una persona específica, pero las pruebas con la tecnología de ADN actual coincidieron con Harvey “y determinaron que la suya era la única evidencia de ADN en la habitación que no debía estar presente”, dijeron las autoridades.

El cuerpo de Macho fue encontrado en un área boscosa cerca de una granja donde Harvey trabajó brevemente en el momento del crimen, y su vehículo fue encontrado abandonado en una planta de alcantarillado cercana, a poca distancia de la casa de Harvey, dijeron las autoridades.

Harvey fue sentenciado a muerte y luego a cadena perpetua por la violación y asesinato de una mujer de Plainsboro en 1985, pero mantuvo su inocencia durante tres décadas y estaba esperando un tercer juicio en el caso. Estuvo encarcelado desde el momento de su arresto en 1985 hasta su muerte en la prisión estatal de South Woods en Bridgeton en noviembre de 2020, dijeron las autoridades.