Rafael Solano nació músico
SANTO DOMINGO. Creo que la primera vez que lo vi sentado al piano y cantando fue por Rahintel hace todos los años. A su lado en una famosa Hora del moro, otros artistas le hacían coro. Luchy Vicioso, Fernando Casado, Nini Caffaro y Freddy Beras.
Un hombre sencillo con un talento inmenso que llenaba de bellas melodías ese mediodía dominicano. Luego vinieron los festivales y sus continuos éxitos, impresionante la humildad que acompaña su figura, su don de gente y su identificación con su Puerto Plata que lo vio nacer.
Esa gloria dominicana me toca preguntarle hoy, espero que me responda.
P. Ser músico es...
R. Un ser especial, escogido de la Naturaleza para expresar lo que el lenguaje no puede.
P. La vida te ha dado
R. Todo lo que he querido. Si algo no he tenido aun habiéndolo deseado, al cabo del tiempo descubro que no era necesario.
P. Por amor...
R. Más que satisfacción personal, sentimiento dominicanista. Me preguntaba siempre por qué no existía una canción dominicana de conocimiento en el mundo como tantas tenían Cuba, Puerto Rico y otros países, sin esperar que la paloma de la inspiración vendría a posarse precisamente sobre mis hombros. Las únicas noticias musicales dominicanas en todo el orbe, hasta entonces eran, “Compadre Pero Juan”, y el “Hombre Marinero”, dos merengues.
P. Qué surge primero, la letra o la música.
R. Ambas a la vez, una viene con la otra en un solo haz.
P. La vida de un artista es
R. Incomprendida. La mayoría piensa que el artista existe para su propio entretenimiento. El comercialismo se encarga de incrementar este falso concepto.
P. Aquella vez fuiste embajador en Francia y....
R. Además de haberle servido al país dignamente, me sirvió de cierto desarrollo intelectual y profesional a la vez. Vivir en Francia durante 4 años, se evita uno de leer muchos libros, al tiempo de entrar en contacto con la mejor música del mundo.
P. Cómo quieres que te recuerden.
R. Como un perfecto incapacitado para infligir daño a ningún semejante.
P. De no haber sido músico...
R. Pues, no concibo otra profesión que no sea con un piano por delante.
P. Cuando niño soñabas con...
R. Ser músico. Figúrate, con solo 11 años andaba por las calles en Puerto Plata con un pianito de juguete tocando lo que me pidieran.
P. Y ahora?
R. Todo el día, si no toco, entonces canto, ...o pienso en algún giro melódico. Para dormir tengo que hacer ejercicios de concentración para poner la mente en blanco. Aunque no siempre tengo logros.
P. Hacia dónde sientes que va la música popular
R. Cada vez se torna más comercial. Desde hace cierto tiempo se impone la imagen sobre la calidad, y eso es lamentable. “Lo que vende”, “lo que le gusta a la gente”, son los dos conceptos más dañinos en cuanto al verdadero arte se refiere.
P. La política te...
R. Me causa gran aflicción cuando el arte y la cultura dejan de ser argumentos primordiales en las mentalidades de los políticos. Francia, Inglaterra, Italia, México y muchos países más, invierten en sus valores culturales, de eso viven, es su mayor riqueza. ¿Es esto tan difícil de entender?
P. Tu familia, tus hijos.
R. Tengo nietos y nietas que van desde los 11 hasta los 30 años. Aparte de ellos, está mi esposa Amarillys, con quien mantengo un matrimonio ya de larga data. Con mis tres hijas Carmen, Patricia y Cecilia y mi hijo Rafael, tengo el privilegio de poder sentarme o viajar con ellos para discernir, platicar abiertamente sobre la existencia humana, el pensamiento, el arte, las diferentes tendencias culturales, la música en sus varios aspectos. No son capaces de tocar un instrumento, tienen diferentes profesiones, pero cuando salen de un concierto, anda!, pregúntales y te darán una exacta respuesta crítica.
P. Donde está el amor
R. El amor no es un sentimiento, ni mucho menos una atracción física como se cree. El amor es una actitud de constante compasión hacia todo lo que existe, todo lo que nos rodea.
P. Crees en...
R. Decir que uno cree en algo, implica no estar seguro de sí mismo. Si digo que creo en la existencia de algo, quiero decir, que podría no existir, pero que yo creo que existe. Yo no creo en nada, amigo Freddy, yo percibo, realizo, veo, escucho, y en aquello que percibo y realizo y asevero, se define mi existencia, mi comportamiento. Finalmente, solo en el silencio, con la mente en reposo, se puede alcanzar tal percepción.
Rafael Solano, es un pianista, compositor, escritor,1 y ex-embajador dominicano ante la UNESCO.2 3 Autor de más de un centenar de composiciones de diversos géneros que abarcan las de corte romántico, folklóricas, así como también corales y religiosas, además de merengue, por supuesto. Su canción Por amor ha sido la canción dominicana de mayor proyección en el mundo, traducida a varios idiomas e interpretada por cantantes como Niní Cáffaro, Marco Antonio Muñiz, Jon Secada, el Mariachi Vargas, Vicky Carr y Plácido Domingo.