El crimen sigue comandando desde adentro de las cárceles
El caso más reciente es el de Pascual Cabrera, que según la Procuraduría, lideraba poderosa red de narco en varios puntos del país
SANTO DOMINGO. Ni la Procuraduría General de la República ni las autoridades penitenciarias han podido impedir que los cabecillas de organizaciones criminales dejen de dirigir acciones delictivas desde adentro de los recintos carcelarios.
Ayer sábado la propia Procuraduría General de la República reveló un caso reciente al informar que Jesús Pascual Cabrera Ruiz, quien guarda prisión preventiva en el Centro de Corrección y Rehabilitación (CCR) de La Romana bajo acusación de lavado de dinero producto del narcotráfico, lidera desde prisión una poderosa red criminal dedicada al narcotráfico y al sicariato en diferentes puntos del país.
Según las informaciones de la Procuraduría, unas 20 personas relacionadas de la red de Pascual Cabrera fueron arrestadas ayer tanto en distintas zonas de Santo Domingo y La Romana. Pero las cosas van más allá. De acuerdo con las informaciones oficiales, la organización tenía células dentro de varios recintos carcelarios, entre ellos la cárcel pública de San Francisco de Macorís, y en los CCR Rafey Hombres, en Santiago, y en Cucama, de La Romana, lugares en los que se ocuparon armas de fuego, incluyendo varios fusiles, y dinero en efectivo.
Ayer durante el operativo conjunto de la Procuraduría y de la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD), resultaron muerto en La Romana dos miembros de la organización. Los ultimados fueron identificados como Francisco Javier Rodríguez Camacho, quien era considerado el número dos de la estructura criminal y encargado de operaciones de Cabrera Ruiz, también mataron a Rubén Junior Sosa, quien formaba parte de la misma.
Entre los crímenes que se les atribuyen a la banda criminal están los asesinatos de Juan Francisco Piña Mateo, alias Francis Boutique, ocurrido el 27 de marzo del presente año; también el de José Bienvenido Marte Mercedes, ocurrido el pasado 24 de abril; además del asesinato de Randy Mario Manzanillo, ocurrida el 18 de julio del año en curso, entre otros hechos de sangre.
Otros crímenes ordenados desde prisión
En junio de 2015 las autoridades revelaron que el asesinato del periodista Blas Olivo lo ordenó una banda de delincuentes dirigida desde la cárcel de Monte Plata, vinculada al narco boricua José David Figueroa Agosto.
En ese entonces, le atribuyeron la responsabilidad al recluso José Miguel Rodríguez Almonte, mejor conocido como Job, quien al momento del crimen estaba preso en la cárcel de Monte Plata.
El 2 de junio de 2010, el abogado y comunicador Jordi Veras sufrió un intento de asesinato que fue cometido por sicarios contratados por el fallecido empresario Adriano Román mientras cumplía una condena de 20 años en la cárcel de Rafaey - Hombres por el intento de asesinato contra su exesposa Miguelina Llaverías.
Otro nombre que sale a relucir cuando se habla de acciones delictivas cometidas desde las cárceles es el de Rolando Florián Félix, condenado a 20 años de prisión por el tráfico de 953 kilos de cocaína decomisados en Pedernales en el barco Phoenix en 1993. El mismo era considerado “el narcotraficante más temido” del país y lo vinculan con múltiples crímenes y cargamentos organizados por él desde la prisión.