IndyCar: Pato O’Ward remonta y se lleva victoria en Detroit
Pato O’Ward se convirtió en el primer piloto que repite como ganador en Indycar esta temporada, al remontar el domingo en el último reinicio para robarle la victoria a Josef Newgarden en el circuito de Belle Isle Park.
O’Ward estaba en la quinta posición cuando la carrera tuvo un reinicio, con siete vueltas para el final. El mexicano de 22 años de edad rebasó a Graham Rahal en la primera curva, para después superar a Alex Palou en la siguiente, para remontar dos posiciones en las primeras dos curvas.
Después de pasar a Colton Herta para ponerse segundo, el mexicano fijó el objetivo en robarle la que parecía ser una victoria sencilla a Newgarden, dos veces campeón de IndyCar.
O’Ward y Newgarden corrieron rueda a rueda hasta que O’Ward lo superó a falta de dos vueltas para terminar la carrera. O’Ward superó por 6.7595 segundos a Newdarden y le dedicó la victoria a Félix Rosenqvist, su compañero de equipo en Arrow McLaren SP y quien pasó la noche en el hospital después del choque que sufrió el sábado en la primera carrera de la doble cartelera en Detroit.
“Hablé con Felix esta mañana y lo importante es que está bien, y le dije ‘Voy a ganar por ti”, dijo O’Ward. “Soy un hombre de palabra, lo quería conseguir por él”.
O'Ward, quien consiguió el mes pasado su primera victoria en la categoría, sacó un punto de ventaja sobre Palou en la clasificación del campeonato. Ya ganó en un óvalo y en un circuito callejero, además de haber sido tercero el sábado para un fin de semana de doble podio en Detroit.
Se quitó los zapatos después de su presentación en el podio y se zambulló en la fuente conmemorativa James Scott, donde salpicó a los aficionados que se reunieron para celebrar su victoria.
Newgarden arrancó desde la pole y lideró en 67 de las 70 vueltas, hasta que O’Ward lo superó y lo relegó a la segunda posición, por lo que el equipo Penske se mantiene sin victoria en la temporada.
“Venía como una locomotora”, dijo Newgarden, quien no pudo ocultar su frustración, sobre O’Ward. “Te rompe el corazón cuando terminas de ese modo el día. Es difícil no sentirse decepcionado. Pienso que teníamos el carro para vencer”.
La del domingo fue una carrera mucho menos agitada que la del sábado, cuando el percance de Rosenqvist provocó que se detuviera la competencia con bandera roja por cerca de 90 minutos y que una parada posterior decidiera ponerle fin a la carrera.