Se confirma la autenticidad de la cruz de la Catedral
SANTO DOMINGO. La Oficina de la Obra y Museos de la Catedral de Santo Domingo acaba de realizar una investigación mediante la cual ha podido identificar y datar la cruz que hace algo más de 500 años fue colocada durante el acto de bendición del solar de la Catedral de Santo Domingo junto a otras cuatro cruces ya desaparecidas.
La bendición fue realizada el 26 de marzo de 1514, notarizada por Diego de Herrera en lucida ceremonia religiosa presidida por Pedro Suárez de Deza, primer obispo de la Concepción de La Vega, quien estaba recién llegado al puerto de Santo Domingo para continuar su viaje hacia su sede a ejercer sus funciones.
La ceremonia se celebró en presencia del Virrey y Segundo Almirante don Diego Colón; el tesorero del rey Miguel de Pasamonte; los oidores de la Real Audiencia y Chancilleria de Santo Domingo, Marcelo de Villalobos, Juan Ortiz de Matienzo y Lucas Vázquez de Ayllón; los alcaldes Francisco de Roldán y Juan Mosquera, y todo el Regimiento de la Ciudad. Según el acta, se colocaron cinco grandes cruces de madera indicando que allí se construiría el templo: “Enfrente de la esquina de la casa donde vivía el tesorero (Miguel de Pasamonte) hacia la cárcel, y otra a la esquina de la casa del secretario (Pedro de) Ledesma, y otra a la esquina de la plaza, frontero a las casas de Diego de Vergara, y la otra a la otra esquina junto al solar de (Alonso) Zuazo”. La quinta cruz, siguiendo la tradición medieval, se colocó en el centro del solar.
La tradición decía que la Cruz de la Catedral era una de esas cinco cruces que se colocaron en las cuatro esquinas del solar y en el centro, sin embargo, hasta el momento no se había confirmado científicamente este hecho, incluso algunos lo ponían en duda. Esto motivó a la Oficina de la Obra y Museos de la Catedral a realizar el estudio, pues desde hace varios años ha venido desarrollando un programa de investigación que conjuga ciencia, tecnología y patrimonio, con el objetivo de aumentar el conocimiento de los materiales que constituyen el patrimonio mueble e inmueble de la Catedral Primada de América.
Siguiendo las últimas tendencias a nivel internacional, la responsabilidad de garantizar que el patrimonio pueda llegar a las futuras generaciones permitiendo su uso y exhibición, recae en las investigaciones científicas aplicadas a la conservación y protección del patrimonio cultural con el fin de prevenir daños y garantizar su conservación material, para obtener resultados claros y fidedignos de los bienes, y aportar valor y conocimiento de ellos.
Mediante datación por radiocarbono o carbono-14, se comprobó que la Cruz de la Catedral fue confeccionada con madera cortada entre 1498 y 1528, se afirma con este resultado que es una de las cinco cruces que se colocaron en 1514 para la bendición del solar, hace 504 años.
En este caso la técnica utilizada para datar la cruz fue la espectrometría de masas con aceleradores (AMS) que es un método moderno de datación por radiocarbono que está considerado como la forma más eficiente de medir el contenido de radiocarbono de una muestra. La AMS implica la aceleración de iones a energías cinéticas muy altas seguida de un análisis de masa. El análisis se realizó en un laboratorio especializado bajo la normativa internacional ISO/IEC 17025-2005 que establece los requisitos que deben cumplir los laboratorios de ensayo y calibración.
Otro análisis realizado a la cruz fue determinar sus características anatómicas mediante el método de la Anatomía Comparada de la Madera, se estableció que la madera de la Cruz de la Catedral Primada de América es caoba dominicana (Swietenia mahagoni). Para ello se hicieron observaciones de las secciones transversales, radiales y tangenciales en el microscopio digital con aumentos de 20-250X las cuales fueron fotografiadas.
Este trabajo contó con la colaboración del Proyecto de Investigación FONDOCYT/PUCMM “Ensayos no destructivos y pseudos no destructivos para determinar los elementos de madera en edificaciones históricas y soluciones para evitar los procesos de degradación”.
Estas investigaciones contribuyen con el conocimiento de la historia, con la conservación del patrimonio cultural de la nación y ayudan a la construcción de la identidad.