Desalojados de Los Farallones demandan ayuda del presidente Abinader

Afirman han quedado a la intemperie con sus familias

Santo Domingo Este - oct. 21, 2020 | 03:00 a. m.

Desalojados del Gran Parque de Las Américas, en Los Farallones de este municipio, demandaron la intervención del presidente Luis Abinader ante la situación en que están luego que las casitas que ocupaban fueran derribadas por el Ministerio de Medio Ambiente por estar construidas en área protegida.

Parte de las 43 familias que ocupaban igual cantidad de casuchas, de un total de 153, dijeron que están viviendo a la intemperie porque les destruyeron las casas encima la madrugada del pasado martes.

Beatriz de la Rosa, una de las afectadas, tiene cuatro niños, la mayor de seis años y la menor de tres meses y apela a la sensibilidad del presidente Abinader y de su esposa, Raquel Arbaje, para que se le reubique en otro lugar.

“A ellos no le importó venir a la una de la mañana a desalojar, tirando tiros, sabiendo ellos que había personas durmiendo, que había niños y para justificar el desorden que estaban haciendo, vinieron con Conani a recoger las mujeres que tienen niños y nos llevaron engañadas”.

Indicó que gracias a la benevolencia de los vecinos ella y sus hijos pudieron comer porque a los representantes de las instituciones que participaron en el desalojo no les importó la vida ni de los niños inocentes.

“Señores, ¿dónde está la conciencia del ser humano? Se preguntó y dijo que fueron con helicópteros, policías y representantes de diversas instituciones a desbaratar las casas como si estuvieran buscando a un narcotraficante.

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La mayoría de las casuchas derribadas estaban construidas en hojalata porque, según los desalojados, apenas tenían seis meses en el lugar y estaban conscientes de que esos terrenos del Estado, pero no que era área protegida.

Jean Carlos Mateo, explicó que decidieron ocupar los terrenos porque muchos padres de familia se quedaron sin empleo a raíz de la pandemia del coronavirus y no podían seguir pagando alquiler o simplemente porque molestaban en los lugares donde estaban.

“Hoy yo tenía una cita con la hija mía, la más grande, en el Angelita (hospital Robert Read Cabral) para operarla de un tumor en el cuello, pero ellos no la han llevado y ni desayuno le han dado y anoche durmieron en el suelo”, dijo.

Fanny Minyeti es una vecina de los desalojados y cuenta que en ese lugar atracaba a mucha gente y hasta mataban personas, pero entiende que fue un abuso lo que cometieron con esas personas. Atribuyó el desalojo a que personas poderosas están interesadas en esos terrenos.

Por su lado, el teniente coronel Lebrón de los Santos, uno de los responsables de dirigir el proceso de recuperación del parque, dijo que en ese lugar hay fuente de agua dulce que hay que proteger como manda la Ley.

“Aquí hay una fuente de agua dulce que son la reserva y el futuro del municipio Santo Domingo Este, estamos aquí como dolientes y miembro de la Fuerzas Armadas y en apoyo al Ministro de Medio Ambiente y el ayuntamiento de Santo Domingo Este, porque estamos en la obligación y el deber de proteger todo esto”, dijo el oficial.

De acuerdo con el ministro de Medio Ambiente, Orlando Jorge Mera, el lugar ocupado es de 2.6 kilómetros, declarada área protegida por los recursos hídricos y las especies endémicas que hay. Indicó que detrás de esas ocupaciones hay personas con poder político, incluso, un regidor de Santo Domingo Este que intenta sacar provecho personal con los terrenos.