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Sufragistas y feministas

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Sufragistas y feministas
Ercilia Pepín
Hace cuatro años comenzó la exhibición en los Estados Unidos de un filme titulado "Ángeles de Hierro" (Iron Jawed Angels, 2004) que trata de la lucha de las mujeres estadounidenses por lograr que el gobierno federal de aquel país les reconociera el derecho al voto.

Hasta 1920, no todas las mujeres norteamericanas podían votar, pues la política tradicional había sido dejar que la votación femenina fuera decidida por los estados de la Unión.

El filme cuenta la historia de los esfuerzos de un grupo de jóvenes mujeres para tratar de convencer al presidente Woodrow Wilson a que sometiera ante el Congreso un proyecto de enmienda constitucional para hacer universal el voto femenino y el derecho de las mujeres a ser elegidas.

Tanto el Presidente Wilson como muchos congresistas se oponían abiertamente a esta idea, de la misma manera que lo hacían muchas mujeres que consideraban que la política no era una actividad digna de madres de familia y muchachas decentes.

Ni que decir que una parte importante de la población masculina también se oponía a esa reforma constitucional por razones y sinrazones similares, pero el activismo de las "sufragistas" fue tan intenso y decidido que, finalmente, el Presidente Wilson tuvo que ceder y, de mala gana, se vio obligado a someter ante el Congreso de su país la mencionada reforma constitucional, que fue aprobada en 1920.

La lucha por el derecho femenino al sufragio fue un movimiento que venía extendiéndose por los principales países industrializados del planeta desde el siglo XIX, así como por varios países latinoamericanos, entre ellos, Colombia, Ecuador, Argentina y Brasil.

Esta lucha fue parte de un movimiento feminista más amplio para que los estados también reconocieran otros derechos civiles fundamentales que les eran entonces negados a las mujeres, como ocurría en Francia y los países de tradición jurídica francesa a partir de la aprobación del Código Civil napoleónico en 1804.

Entre esos derechos, las feministas abogaban por la igualdad jurídica de los sexos, la participación plena de la mujer en el mercado laboral, el acceso universal a la educación secundaria y universitaria, y la igualdad del hombre y las mujeres en la familia, para sólo mencionar unos cuantos.

La República Dominicana fue uno de los países bajo influencia jurídica francesa en los cuales la lucha comenzó relativamente tarde, aunque sus resultados se vieron más temprano que en otras sociedades, algunas de ellas más modernas.

Al igual que en muchos otros países, aquí la lucha fue ardua y larga, y los resultados se alcanzaron solamente después de inmensos sacrificios.

Una historia muy bien contada acerca de las sufragistas y feministas dominicanas fue publicada en abril de este año 2008 en un video documental presentado en la televisión con el título "Las sufragistas".

Este video fue producido por Producciones Jatnna, que dirige Jatnna Tavares, a partir de un inteligente guión escrito por Martha Checo y su co-guionista Virginia Binet, quienes se apoyaron en las investigaciones realizadas por la reconocida intelectual Ilonka Nacidit Perdomo. Todo el documental es narrado por Carmen Imbert-Brugal.

Según sus productoras, "el documental narra la emancipación de la mujer como sujeto social, la conquista de la ciudadanía y el derecho al sufragio, lo cual catapultó a la mujer dominicana en 1942 a votar por primera vez en unas elecciones presidenciales generales, lucha impulsada por un grupo de maestras normales, intelectuales y artistas, que representaba las mentalidades más preclaras de la nación".

"Entre ellas figuran Abigaíl Mejía, Delia Weber, Celeste Woss y Gil, Livia Veloz, Carmen González de Peynado, Patria Mella del Monte, Petronila Angélica Gómez, Ercilia Pepín, Isabel Amechezurra Vda. Pellerano, Milady Félix Miranda, María Patín Pichardo, Amada Nivar de Pittaluga, Consuelo Montalvo de Frías, entre otras".

Pocas veces se ha producido en el país un documental histórico con la alta calidad de éste. Tanto las entrevistas como la narración poseen una notable riqueza argumental reforzada por sus productoras con una apreciable cantidad de fotos y documentos inéditos recogidos por Ilonka Nacidit Perdomo.

Este documental viene a añadirse a una importante lista de publicaciones feministas que comenzó a principios del siglo XX con la publicación de la obra de Antonia García, "La mujer: Lo que es y lo que debe ser. El feminismo. Mi modo de pensar sobre el divorcio" (1913, 40 pags.).

Algunas de esas publicaciones son prácticamente desconocidas hoy, aún por las mismas feministas, y por ello deseo contribuir a un mejor conocimiento del tema mencionando las obras feministas y sufragistas más relevantes publicadas en la República Dominicana en el siglo XX.

Antes de continuar, es importante mencionar que el feminismo dominicano remonta sus orígenes hasta las prédicas y acciones de Eugenio María de Hostos, pues su constante discurso acerca de la necesidad de la educación superior para lograr la emancipación de la mujer dio lugar a un movimiento de ideas que eventualmente desembocó en el feminismo dominicano.

Las ideas de Hostos fueron apoyadas por el maestro Federico Henríquez y Carvajal, y aunque el feminismo fue atacado por algunos intelectuales del sexo masculino, como Manuel F. Cestero, el empuje de las ideas de Antonia García y las demás feministas mencionadas más arriba mantuvo el movimiento vivo y combatiente, como lo demuestra el documental de Jatnna Tavares, Ilonka Nacidit Perdomo y Martha Checo.

De Ercilia Pepín se conserva un importante trabajo titulado "Feminismo" (Santiago de los Caballeros, 1930, 50 pags.); y de Livia Veloz se conserva también su "Historia del Feminismo en la República Dominicana" (1932). De aquellos años data también la famosa obra de Abigail Mejía "Ideario feminista y algún apunte para la historia del feminismo dominicano" (1939, 31 pags.).

Hubo otros muchos escritos sobre este mismo tema publicados entre 1913 y 1942 que todavía andan dispersos en periódicos y revistas, y que esperan ser recogidos y editados.

Sabemos, por lo que nos cuenta el documental, que el feminismo dominicano fue capturado por la dictadura trujillista, a pesar de la oposición de sus más ardientes promotoras.

Por ello no es sorpresa que en los años 1943, 1945 y 1947, el gobierno auspiciara la celebración de tres congresos dedicados a exaltar la participación de la mujer como votante en las elecciones de 1942, gracias a la reforma electoral que le concedió la "igualdad política" con los hombres.

La documentación de esos congresos fue conservada en las siguientes publicaciones: "Primer Congreso Femenino Dominicano, Sesión Plenaria Inaugural" (1943. 57 p.); "Mensajes dirigidos al Excelentísimo Señor Presidente de la República: Primer Congreso Femenino Dominicano" (1943. 4 v.); "Primer Congreso Femenino Dominicano: Reglamento, Resoluciones y Programa" (1943, 12 h.); y "Primer Congreso Femenino Dominicano: Reglamentos" (1943, 45 p.).

Asimismo, "Segundo Congreso Femenino Dominicano: Santiago 1945: Cédula de Delegada". (1945, 46 p.); y "Segundo Congreso Femenino Dominicano: Reglamento y Agenda" (1945, 22 p.).

Ver, además, Congreso Femenino Dominicano, "La mujer dominicana en documento trascendental proclama la reelección del Presidente Trujillo en el año 1947" (1945, 524 p.).

Las feministas, trujillistas o no, continuaron publicando obras que, independientemente de sus motivaciones, mantuvieron vivo el discurso de la igualdad necesaria de ambos sexos, como puede verse en los siguientes títulos:

Carmen Lara Fernández, "Historia del feminismo en la República Dominicana" (1946, 191 p.); Petronila Angélica Gómez, "Contribución para la historia del feminismo dominicano" (1952, 143 p.); y María Caridad Nanita, "La mujer dominicana en la Era de Trujillo" (1953, 41 p.).

El feminismo trujillista tuvo también sus plumas masculinas, como fue el caso de Julio César Santana, en "La mujer dominicana en la Era de Trujillo: Ensayo". (1956, 24 p.).

Liquidada la dictadura, otros autores masculinos, antitrujillistas, también se ocuparon del tema como se puede ver en la obra de Ramón Alberto Ferreras, "Historia del feminismo en la República Dominicana: Su origen y su proyección social". (1976, 206 p.).

El espacio se nos agota hoy antes de que podamos completar esta rica bibliografía del feminismo, el sufragismo, y la presencia de la mujer en la historia dominicana. La lista es muy grande y necesitaremos de varios artículos más para agotarla.

De Cuba y México el bolero llegó a la República

Dominicana por vía del cine y de los antiguos discos

de 78 rpm, y de los populares cancioneros

románticos que se vendían en las farmacias y

colmados a gentes de todas las edades