El turismo sostenible... ¿dónde lo ponemos?
Las Naciones Unidas han declarado 2017 el año del Turismo Sostenible y el gobierno dominicano lo dedica al Desarrollo Agroforestal. En la declaración que justifica esta decisión se resalta que se dará tratamiento especial al manejo sostenible de los bosques y recursos forestales y de igual forma se contrarrestará la deforestación a través de la explotación agropecuaria.
Aplausos en las gradas, aunque la última frase sea un tanto ambigua. ¿La deforestación se contrarresta con explotación agropecuaria?
El tema es crítico y depende del incumbente de las carteras directamente involucradas. Hay bosques que solo se salvarán si los dejan en paz de una vez por todas y hay proyectos de explotación agropecuaria que van directamente en contra de la naturaleza forestal de algunas áreas.
Hay que ser optimistas. Este mes se vence el plazo para que Valle Nuevo se recupere como zona protegida, las 400 familias que cultivan ilegalmente en sus lomas deberán salir. Más fácil, siguiendo los planes del Ministerio: simplemente no podrán entrar.
Hay curas que llaman a las armas, terratenientes que se oponen a cualquier límite, funcionarios con mansiones en la cima de su gloria, empresarios del carbón vegetal, zares del contrabando, militares que miran para cualquier lado... Pero también hay miles de ciudadanos, cada vez son más, preocupados hasta la obsesión por regenerar los recursos naturales que unas veces la corrupción, la ignorancia y otras veces la angurria, destrozan.
Volviendo al año del turismo sostenible... . Si nos cargamos el país, ¿dónde ponemos a los turistas “sostenibles”?
IAizpun@diariolibre.com