Informes organismos internacionales cuestionan eficiencia del Gobierno
Economista entiende se pierde legitimidad, pero politólogo cree no afecta popularidad de Medina
SANTO dOMINGO. La robusta economía y la revolución educativa que han sido dos de los pilares en los que el presidente Danilo Medina ha edificado la popularidad de que goza en la mayoría de los dominicanos, no encantan igual a los que le observan y analizan el país desde fuera del patio.
Dos informes de organismos internacionales publicados recientemente evidencian que la política gubernamental no ha podido superar viejos escollos.
El estudio Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos (PISA) 2015 dejó atrincherada a la “revolución educativa” de Medina, al mostrar que todavía los estudiantes dominicanos se mantienen en el último lugar en conocimientos de contenidos básicos en áreas como ciencia, lectura y matemática. La prueba se realizó a una muestra de 540,000 estudiantes en 72 países. De una media de 493 en ciencias, el país obtuvo 330, y 358 en lectura. En matemática se alcanzó 328, con una media de 490.
Los resultados han generado cuestionamientos sobre la efectividad del uso de los recursos del 4% del PIB a la educación que se otorga desde el 2013, primer gobierno de Medina.
El Banco Mundial, que reconoce el excepcional crecimiento económico del país, un 5.1% entre 2001 y 2013, siendo el cuarto de mayor incremento en la región; critica que ese crecimiento no ha sido inclusivo, y que la tasa de pobreza todavía está por encima del promedio de América Latina y el Caribe.
“La combinación de alto crecimiento económico y tasas de pobreza persistente pueden atribuirse a factores que son únicos a RD...”, indica el informe del BM, que pasa luego a citar dichos factores: “...(i) un mercado laboral que no parece recompensar plenamente a los trabajadores por su productividad creciente; (ii) una economía interna con encadenamientos intersectoriales débiles; y (iii) un sector público que no gasta lo suficiente ni particularmente bien para reducir la pobreza”.
El Banco Mundial agrega otros factores, como el hecho de que el país sigue altamente expuesto a desastres naturales y choques exógenos que, “si no se mitigan adecuadamente eligiendo políticas correctas, pueden afectar la sostenibilidad del crecimiento y la prosperidad compartida a mediano y largo plazos”.
Esos resultados, son a juicio del economista Miguel Ceara Hatton, la confirmación de que el modelo económico no es el adecuado, que está basado en una estructura monopólica, de concentración del ingreso y endeudamiento, y advierte, que de seguir el mismo esquema, el país se encamina hacia una gran crisis económica.
“Lo que destaca el Banco Mundial es algo que ya se ha discutido mucho en la economía dominicana. Los informes de Desarrollo Humano del 2005 y 2008 demuestran claramente que uno de los grandes problemas de la sociedad dominicana es que el crecimiento económico no genera inclusión social, porque no genera empleo, y el que genera es de muy mala calidad, lo que se traduce en baja remuneración y en un empleo muy precario”, indica.
Otro aspecto negativo del modelo económico que destaca Hatton es el clientelismo político, que opera sobre la base de negar derechos, y que lleva al Estado a altos niveles de ineficiencia, sostiene.
“Tenemos un Estado optado por grupos económicos y manejado por grupos políticos que viven sobre la base de la renta, que resultan de las ineficiencias del Estado y eso es un costo que hay pagar en la economía. Y resulta que en el país todos los costos suben, menos el salario”.
Critica que las autoridades del gobierno se han acomodado, y han seguido una política de endeudamiento, que de fondo, lo que esconde es la negación a tener que revisar la calidad del gasto.
“Es un Estado ineficiente y deficitario, entonces, no tiene legitimidad ni credibilidad”, entiende el economista vinculado al opositor Partido Revolucionario Moderno (PRM).