Deudas entre bandas las pagan los inocentes en barrios de la capital
"Esto lo que hay es que desalojarlo. Aquí ya no se puede vivir", vociferó un hombre en Capotillo
SANTO DOMINGO.- Contrario a los pronunciamientos del jefe de la Policía, mayor general Manuel Castro Castillo, de que más del 50% de los hechos criminales son producto de la violencia social y no de la delincuencia, personas residentes en los barrios de la parte alta del Distrito Nacional dicen estar hartos de los pleitos entre bandas y la "dejadez" de las patrullas policiales que operan en la zona.
"Esto lo que hay es que desalojarlo. Aquí ya no se puede vivir", gritó un hombre en la calle Los Humildes del barrio Capotillo, donde en horas de la noche del viernes cuatro sujetos se presentaron frente al colmadón "Tito Frías" e iniciaron un tiroteo que acabó con la vida de Wilkin Araujo, de 15 años , además de lesionar a dos personas más.
Un hermano de la víctima mortal explicó que Araujo se dedicaba a vender empanadas en la zona universitaria y cursaba el séptimo grado de básica. La madre del menor, que padece problemas de hipertensión arterial, tuvo que ser ingresada de emergencias en un hospital tras enterarse de la muerte del menor de sus seis hijos.
El motivo de la balacera, según el informe que ofreció la Policía Nacional acerca de este hecho, el móvil del ataque a tiros fue un "conflicto" que mantienen los nombrados "El Pato", "Jorge Luis", "El Brujo" y "Tuly" contra Cristhofer del Orbe, alias "El Gago", quien resultó herido en esa acción.
Embarazada pierde su bebé
En días anteriores, una joven de 18 años de edad perdió la criatura que llevaba en su vientre al ser informada por error de que su esposo había sido acribillado a tiros en la Calle 42 de este sector. Aunque no fue como presumía la mujer embarazada, en efecto hubo una persona fallecida en este hecho.
Niña de dos años
El pasado miércoles 9 de este mes, la niña María Eduvirgen María Comprés de la Rosa, de 2 años de edad, fue alcanzada por una bala , minutos después de haber salido de manos de su padre quien compraría unos huevos para la cena en el colmado "La Bendición", de Las Cañitas.
Estos casos dan cuenta de que los delincuentes tienen una amplia facilidad de conseguir armas de fuego y portarlas en las calles de estos sectores a sabiendas de todo el mundo ya que en su mayoría tienen amplios expedientes delictivos o son reconocidos malhechores en sus zonas.
Sólo en el primer trimestre de este año, en la República Dominicana se registraron 624 asesinatos, de los cuales 171 ocurrieron en la Provincia Santo Domingo que cuenta con una población de 2, 347, 968 habitantes repartidos en 1,300.07 kilómetros cuadrados.
En el Distrito Nacional se registró una tasa de homicidios de 14. 38 por cada 100 mil habitantes.