La dispersión del liderazgo afectaría la intención de protestas
Fidel Santana aboga por unificar iniciativas
SANTO DOMINGO. Las protestas que han realizado diversas organizaciones de la sociedad civil y movimientos de jóvenes independientes contra la reforma fiscal lucen dispersas y sin un liderazgo claro que represente a los sectores demandantes y se siente en la mesa del diálogo con el Gobierno para lograr parte de los cambios que exigen en la política económica.
A esto se agrega la división que mantiene el principal partido de oposición, sin que allí se vislumbren posiciones unificadas.
El politólogo Pedro Catrain asegura que el peligro en el actual clima político radica en la respuesta que dé el gobierno a las movilizaciones y en que no muestre apertura al diálogo con los sectores.
Exhortó a las autoridades a deponer la actitud que a su juicio tienen, de rechazo las conversaciones con los grupos que protestan.
Pero para el politólogo Belarminio Ramírez, las movilizaciones actuales no tienen motivaciones personales, sino políticas.
"Esta gente quiere vengarse de Leonel, y está activándose y movilizándose con el objetivo de cerrarle toda posibilidad de retorno al poder. Por tanto, Leonel debe jugar al tiempo. No hace nada con dar explicaciones, ni con tratar de convencerlos y persuadirlos, porque ellos no se interesarán en sus explicaciones", dijo.
En un trabajo publicado a raíz de las protestas, Ramírez asegura que las manifestaciones con un matiz político fueron planificadas desde antes de que se produjera la transición de mando.
El dirigente del Foro Social Alternativo y presidente del partido de izquierda Frente Amplio, Fidel Santana, advirtió que las protestas deben salir de un consenso general en el que todas las organizaciones articulen sus acciones juntas y no se hagan dispersas.
Sostuvo que, dependiendo del manejo que dé el Gobierno en enero, las organizaciones populares podrían llamar a huelgas y protestas nacionales, ya que en ese tiempo los sectores pobres comenzarían a sentir de lleno los efectos inflacionarios que a su entender generará la reforma fiscal diseñada por el Gobierno. "Hay una toma de los espacios públicos por la juventud de la clase media que tiene cierta capacidad y autonomía, y esto es un fenómeno nuevo que viene acompañado de un tipo de protesta cívico, fundamentalmente sin violencia con una convocatoria esencialmente a través de las redes sociales", expuso.
Ideas, no huelgas
El Gobierno, en voz del ministro de Interior y Policía, y miembro del Comité Político del partido gobernante, José Ramón Fadul, ha advertido que "hay una desesperación, pero están tomando un camino absurdo porque toda acción tiene una reacción".
Fadul tildó a los protestantes de arrogantes y prepotentes porque por un lado reclaman ser escuchados y por el otro mandaron a apagar los televisores para que no escuchar el discurso del expresidente Fernández, lo que a su juicio constituye una intolerancia.
Para el funcionario, Fernández habló "claro y preciso al país" y en su criterio, los sectores que no estén de acuerdo deben combatirlo en el plano de las ideas no con llamado a huelgas.
El ministro de Interior y Policía aseguró que la paz y la gobernabilidad esta garantizada en todo el país.
Justicia y hastío
El vicepresidente del Partido Revolucionario Dominicano (PRD), Alfredo Pacheco, consideró que el civismo mostrado por los dominicanos ha colocado a la población en un nivel superior al de sus instituciones ante los ojos del mundo.
El expresidente de la Cámara de Diputados felicitó el espíritu y el empoderamiento que han tomado los jóvenes dominicanos, demostrando que si no funciona la justicia ordinaria, la justicia popular le pasará factura a los políticos que abusen de los fondos del Estado.
Manifestó que hay mucho asombro y preocupación en la prensa y la comunidad internacional por el hastío que manifiesta la población dominicana ante ocho años de corrupción, dispendio e impunidad que hoy tienen que pagar los pobres y la clase media.
372 protestas en 92 díasEl ministro de Interior y Policía, José Ramón Fadul, deploró que al presidente Danilo Medina no le hayan respetado la tregua acostumbrada de 100 días, ya que le han realizado 372 protestas. Fadul denunció que hasta el ex presidente Hipólito Mejía está llamando a paros y apoyando las huelgas, cuando por su condición debió de ser más comedido. "Lo que ha habido es una desesperación de la oposición por posesionarse en el liderazgo de ese sector. Hay una desesperación pero están tomando un camino absurdo porque toda acción tiene una reacción", dijo en nota enviada por el PLD.