Orinar en vía pública, de día, sin ningún pudor y frente a los transeúntes

SD. Sin ningún pudor y a plena luz del día, este hombre se desmontó de su vehículo en la avenida Abraham Lincoln, frente a este diario, para orinar. Lo hizo con toda la calma del mundo. Ni siquiera respetó la presencia del niño, que presumimos es su hijo, que se encontraba en el interior de la yipeta, ni mucho menos pensó en algún posible reproche de la señora y la jovencita que pasan a su lado. Este hombre tenía varias opciones para evitar su inconducta, pero prefirió la vía pública. Por el desenfado exhibido, parece estar muy acostumbrado a hacerlo así.