Elogios de la editora de Alice Munro
FRANCFORT. La editora de Lumen, Silvia Querini, que tiene los derechos en español para la obra de Alice Munro, definió la obra de la Premio Nobel de Literatura como un universo que muestra "la complejidad que está hirviendo debajo de la aparente banalidad".
Querini hizo esa declaración ante un grupo de periodistas en la Feria del Libro de Fráncfort tras llegar al stand del grupo Random House visiblemente emocionada por el galardón concedido a la escritora canadiense.
"Es una satisfacción tan grande", dijo Querini sin salir todavía de su conmoción, pese a que no es la primera vez que uno de sus autores obtenía el Premio Nobel de Literatura.
En esta ocasión la emoción tenía algo especial porque, según explicó, había luchado nueve años por obtener los derechos de Munro.
"Luché nueve años por tener a Alice Munro en Lumen. Si hubiera que ilustrar el catálogo de Lumen con una sola imagen, esa imagen tendría que ser la foto de Alice Munro", dijo.
"Alice Munro refleja el mundo que le quiero mostrar a mis lectores cuando edito libros", agregó.
Querini, al ser preguntada por si no había tenido algunas reservas ante una autora que escribe fundamentalmente cuentos -lo que no suele agradar a los editores- dijo que ante una obra como la de Munro sólo se pueden tener "las mismas reservas que se pueden tener ante Borges".
"Una gran obra está ahí y uno la reconoce", dijo.
La editora señaló a Efe en declaraciones por telefónicas que "hay autores que en sus escritos dan respuestas, pero Alice Munro planeta buenas preguntas".
"Ahí radica su éxito, en la perplejidad, en no darlo todo por descontado, en saber que debajo del hule de la mesa de una cocina puede haber muchas historias que no son fáciles de contar, y Munro lo consigue con las 26 letras del alfabeto", señaló.
Munro, según explicó Querini en Fráncfort, ha escrito fundamentalmente cuentos porque buena parte de su obra la escribió durante el tiempo que le dejaba la hora de la siesta de sus hijos pequeños.
Aunque entre la bibliografía de la canadiense también hay una novela, "La vida de las mujeres". Querini define ese libro como "un cuento largo" que muestra como ese género es el territorio en el la Premio Nobel mejor se mueve.
El primer libro que publicó Lumen de Alice Munro fue "Demasiada felicidad", una colección de cuentos. El último cuento le da el título al libro y recoge la historia de una gran matemática en el siglo XIX.
"Nadie le hacía caso porque era mujer, pero llega el momento en que al fin la reconocen y la nombran profesora en una universidad y entonces muere de un constipado. Fue demasiada felicidad", relató la editora.
Según Querini, muchas de las escritores jóvenes que publica Lumen tienen a Munro como maestras y el premio también va a ayudarles a ellas.
Si Querini tuviera que elegir un sólo cuento para reflejar el mundo de Alice Munro escogería, dijo, el que abre "Demasiada felicidad", que relata el viaje en autobús de una mujer que reflexiona mientras se dirige a la cárcel a visitar a su marido, que también es el asesino de sus dos hijos.
Lumen ha publicado de Munro las obras "Demasiada felicidad" (2010), "La vida de las mujeres" (2011) y "Mi vida querida" (2013).
Pero antes se dio a conocer en España de la mano de RBA con la publicación de "Odio, amistad, noviazgo, amor, matrimonio" (2003).
En su carrera al Nobel destacan en esta editorial títulos como "Escapada" (2004), "Secretos a voces" (2005), "El amor de una mujer generosa" (2009), "El progreso del amor" (2009) y "La vista desde Castle Rock" (2013).
Ayer la escritora manifestó su sorpresa y dijo estar "terriblemente sorprendida" por el premio.
Décimo tercera mujer Premio Nobel de Literatura
Con la canadiense Alice Munro son apenas 13 las mujeres reconocidas con el Premio Nobel de Literatura. La primera fue la sueca Selma Lagerlöf en 1909; luego Grazia Deledda (Italia, 1926); la noruega Sigrid Unsët (1928); diez años después la norteamericana Pearl Buck; en 1945 la chilena Gabriela Mistral -única hispano parlante-; en 1966 fue la sueca Nelly Sach; 25 años después, Nadine Gordimer (Sudáfrica), en 1991; dos años después lo obtuvo Toni Morrison (EE.UU.); en 1966 fue la polaca Wyslawa Szymborska; en el 2004 lo recibió la austríaca Elfriede Jelinek; tres años después, en 2007 fue la británica Doris Lessing; y la alemana Herta Müller en 2009.
Pero, en Cartagena de Indias, Colombia debe haber orgullo, pues allí la canadiense Munro, cuyo nombre de nacimiento es Alice Ann Laidlaw (Ontario, 10 de julio de 1931) ha escrito varias de sus obras, que en total son 14 libros, el primero de ellos publicado en 1968 ("Dance of Happy Shades").
Ayer la escritora manifestó su sorpresa y dijo estar "terriblemente sorprendida" y encantada por el premio que según ella es "maravilloso". Dormía cuando se dió a conocer la noticia y fue despertada por su hija. "Sabía que tenía posibilidades, sí, pero nunca pensé que ganaría", dijo a la agencia The Canadian Press en Victoria. Y lo llamó "un sueño imposible", algo "que podía pasar, pero que probablemente no pasaría".
"Estamos en medio de la noche acá y me había olvidado de ello, por supuesto", dijo a CBC.
Alice Munro es considerada como "la Chéjov canadiense" debido a la alta calidad de una prosa basada en mirar las relaciones humanas desde el prisma de lo cotidiano.
Su libro más reciente "Dear life" (2012) contiene esta afirmación: "éstas son las primeras y últimas cosas -también las más fieles, que tengo que decir sobre mi propia vida".